viernes, 22 de febrero de 2019

Templarios y masones. Experiencia de reconstrucción histórica

 


En primer lugar, el tema es tan amplio que solo se describe las relaciones organizativas de los templarios y los masones, sin tocar deliberadamente el componente esotérico. 

Esto requerirá un estudio por separado. 

En segundo lugar, el concepto de relaciones históricas sugiere una búsqueda de los orígenes de la masonería. 

Estamos lejos de pensar que durante casi 700 años los Templarios se conservaron en su forma original y sin cambios. Y por lo tanto, no se trata de una búsqueda de huellas de los templarios como tal, sino de cómo se transformaron las estructuras de los templarios tras la derrota, y si tienen relación con los orígenes de la masonería. Y finalmente, una última observación preliminar.

Propongo considerar el problema en dos direcciones opuestas. Primero. ¿Cómo, desde dónde y por qué los masones irrumpieron repentinamente en la arena histórica y por qué su pasado hasta 1717 está envuelto en un velo de oscuridad? ¿O no hubo historia de la masonería como tal?

Segunda dirección. ¿Cómo, dónde desaparecieron los restos de los templarios y dejaron sucesores? ¿O los propios caballeros, su riqueza, sistema financiero y flota desaparecieron de la noche a la mañana?

El hecho mismo de plantear estas cuestiones a priori sugiere que los masones no podrían haber aparecido de la nada, y los templarios no podrían haber desaparecido en la nada. Pero quién fue el precursor de los masones y quién fue el sucesor de los templarios: estas preguntas siguen siendo relevantes. Demasiado poco material histórico y demasiada especulación en ambos casos. Pero hay otra manera. Este es el camino de la reconstrucción histórica, cuando no se piensa el hecho faltante, dando rienda suelta a la imaginación, sino que se completa, a partir de la lógica del proceso histórico, la situación actual, el análisis de las fuentes escritas y las tradiciones orales.

Comencemos con el origen de los masones. Como saben, 4 logias de Londres en 1717 se fusionaron en la Gran Logia. Y luego surgen preguntas de inmediato. La misma traducción al ruso del término Gran Logia no es del todo precisa. Más bien, significa la Gran Logia, es decir, la logia que unió varias logias más pequeñas. Y en ese momento, la Gran Logia no pretendía ser la representante de todos los masones de Inglaterra (¿o no había ninguno en absoluto?). No es coincidencia que en respuesta a la creación de la Gran Logia, la Gran Logia de York anuncie su creación, reivindicando su historia más antigua. Y Chevalier Ramsay ya en Francia anuncia la introducción de la masonería de Escocia al continente. Luego, mucho más tarde, resulta que las logias masónicas de naturaleza especulativa existieron en el siglo XVII, como lo demuestran las entradas del diario de Ashmole. Hay indicios de que que incluso a fines del siglo XVI, los nobles nobles trabajaban en logias. Y la presencia de logias no se limitaba solo a Londres. Entonces, en cualquier caso, la historia de la masonería especulativa se retrotrae un siglo o más. Pero junto a esto, se nos ofrece una versión sobre el origen de la masonería especulativa desde las entrañas de los gremios medievales de canteros. En mi opinión, esto no resiste ninguna crítica histórica. Y es por eso.

Los gremios de albañiles en la Edad Media no diferían en muchos aspectos de otros talleres medievales. Al menos no se conoce la historia de esto. Pero se sabe que todos los gremios de artesanos urbanos eran extremadamente devotos al catolicismo y al Papa. E imaginar que las logias de masones proclaman la tolerancia a las opiniones religiosas de sus hermanos es imposible. Por cierto, el juramento sobre la Biblia también es un hecho bastante interesante. Los libros en la Edad Media no solo eran caros, sino fabulosamente caros, y es difícil imaginar que cada logia que se reúne en secreto tuviera su propia Biblia.

Están tratando de convencernos de que los albañiles en secreto (!) Viajaron por las ciudades y pueblos, y cuando se encontraron con los hermanos, tuvieron que dar signos convencionales secretos. Esto tampoco encaja en el cuadro histórico de la Edad Media. ¿Por qué los albañiles deben viajar y, además, viajar en secreto? ¿De quién tenían que esconderse? Viajar en la Europa medieval era extremadamente peligroso. Y sin necesidad, nadie salía de la ciudad o del pueblo. ¿Y cuál era la necesidad de los masones para esto? No despejes. Los resultados de su trabajo aparecieron después de varias décadas, y si se construyó un templo, entonces es muy posible que solo los tataranietos de quienes comenzaron el trabajo pudieran ver los resultados. La pregunta es, ¿qué necesitaban en otra ciudad? Se proporcionan puestos de trabajo durante décadas o más, el viaje es peligroso, el nuevo lugar tiene sus propios albañiles, que tenían su pedido y no estaban ansiosos por compartirlo con gente de otras ciudades. En este caso, los gremios de mercaderes son más adecuados para leyendar el origen de la masonería. Los miembros de estos gremios tenían que viajar mucho, enfrentar peligros, guardar secretos comerciales y confiar en la persona de quien dependía el destino de su fortuna, y también la vida.

Incluso dentro del propio gremio, dentro de la misma ciudad, era difícil ascender en la escala social. El lugar del maestro en el taller lo ocupaba una persona específica que tenía su propia herramienta y taller. El número de órdenes dentro de la ciudad medieval, de tamaño muy pequeño, era muy limitado. Y por lo tanto, el nuevo maestro no siempre se convirtió en tal por su estatus oficial después de pasar la prueba de habilidad. Y después de un examen exitoso, aún podría ser un aprendiz durante mucho tiempo, hasta que el lugar del maestro quedó vacante por la muerte de su predecesor o en relación con la expansión del número de órdenes, cuando los maestros existentes no pudieron hacer frente. con el volumen de trabajo.

¿De qué hermandad, de qué asistencia mutua, de qué viajes secretos y de qué terribles secretos, por los que había que estar dispuesto a dar la vida, podemos hablar si consideramos la vida del gremio de los masones operativos? Y por último, sobre los símbolos de la masonería. Un delantal y guantes limpios e impecables, ¿podemos imaginar esto cuando hablamos de albañiles en obras de construcción? (Por cierto, ¿este delantal y guantes, como tales, eran un albañil medieval?) Entonces, los símbolos de la masonería, las tradiciones de secretos, la tolerancia religiosa y mucho más, característicos de los masones especulativos, no pueden tener su origen en los gremios medievales. de masones operativos. Los masones especulativos utilizaron las herramientas de los masones para llenarlas con su significado filosófico y moral y nada más.

Por cierto, sobre filosofía, ciencia y esoterismo en la masonería. Sin entrar en detalle sobre el contenido mismo de estos conceptos, me gustaría llamar la atención sobre lo siguiente. Las ideas mismas de científicos como F. ​​Bacon, como los Rosacruces, y también como los fundadores de la Royal Society, más tarde la Academia, tienen mucho en común entre sí y tienen conexiones directas con la filosofía de la Francmasonería. Pero imaginar que los representantes de la élite intelectual y moral de Inglaterra de repente se juntaron para buscar membresía en los talleres de albañiles medievales, que en los tiempos modernos continuaron aferrándose a sus tradiciones y privilegios, no solo es difícil, sino que me gustaría decir aún más definitivamente - imposible.

Resumamos los resultados intermedios. El uso de la reconstrucción histórica no nos permite estar de acuerdo con la versión extendida del origen de la masonería. La masonería apareció mucho antes de lo que comúnmente se cree. Las logias masónicas eran comunes en Inglaterra y Escocia; sus predecesores no pudieron haber sido los gremios de canteros medievales. En consecuencia, estamos obligados a buscar los orígenes de la Francmasonería en otra parte.

En este caso, volvamos a la segunda dirección de la búsqueda, a los Templarios, más precisamente, al momento de la derrota de los Templarios y los eventos posteriores. Preguntémonos: ¿cuánto daño irreparable hizo el rey Felipe a la Orden del Temple? ¿Podrían los Templarios haber sobrevivido después de esta derrota, o no tuvieron oportunidad? Sí, en Francia el golpe a los templarios fue un golpe demoledor. Pero, ¿cómo se correlaciona nuestra idea de Francia y la presencia de las comandancias templarias en Francia con las realidades de esa época? Cuando decimos que el decreto de Felipe se llevó a cabo en toda Francia, voluntaria o involuntariamente representamos a Francia en las fronteras modernas. Pero en ese momento, varias comandancias en territorio francés no estaban bajo la jurisdicción del poder real de Francia. La provincia de Poitou con la ciudad de Burdeos y una serie de otros territorios fueron posesiones de otros monarcas, en particular, el rey inglés. Por tanto, aquí no se pudo ejecutar la orden de arresto de los templarios. Y en La Rochelle, la flota templaria levó anclas sin obstáculos y partió con rumbo desconocido. Por cierto, siempre me sorprendió este concepto, en una dirección desconocida. La flota de entonces, al no poder ir contra el viento y tener un pequeño desplazamiento, no podía ir muy lejos, solo podía estar dentro del Oikoumene, conocido por los europeos medievales, y esto es el Báltico, Escandinavia, las Islas Británicas, España, Portugal y, menos probablemente, la costa mediterránea. Y, por supuesto, si no tomas a fe la leyenda de que los templarios huyeron a América. Y en La Rochelle, la flota templaria levó anclas sin obstáculos y partió con rumbo desconocido. Por cierto, siempre me sorprendió este concepto, en una dirección desconocida. La flota de entonces, al no poder ir contra el viento y tener un pequeño desplazamiento, no podía ir muy lejos, solo podía estar dentro del Oikoumene, conocido por los europeos medievales, y esto es el Báltico, Escandinavia, las Islas Británicas, España, Portugal y, menos probablemente, la costa mediterránea. Y, por supuesto, si no tomas a fe la leyenda de que los templarios huyeron a América. Y en La Rochelle, la flota templaria levó anclas sin obstáculos y partió con rumbo desconocido. Por cierto, siempre me sorprendió este concepto, en una dirección desconocida. La flota de entonces, al no poder ir contra el viento y tener un pequeño desplazamiento, no podía ir muy lejos, solo podía estar dentro del Oikoumene, conocido por los europeos medievales, y esto es el Báltico, Escandinavia, las Islas Británicas, España, Portugal y, menos probablemente, la costa mediterránea. Y, por supuesto, si no tomas a fe la leyenda de que los templarios huyeron a América. conocidos por los europeos medievales, y estos son los estados bálticos, Escandinavia, las Islas Británicas, España, Portugal y, menos probablemente, la costa mediterránea. Y, por supuesto, si no tomas a fe la leyenda de que los templarios huyeron a América. conocidos por los europeos medievales, y estos son los estados bálticos, Escandinavia, las Islas Británicas, España, Portugal y, menos probablemente, la costa mediterránea. Y, por supuesto, si no tomas a fe la leyenda de que los templarios huyeron a América.

Así, incluso en Francia, la orden de arresto de los Templarios no pudo ser ejecutada, lo que significa la preservación de la libertad para un número significativo de miembros de la Orden, incluso en Francia. Pero eso no es todo. Se sabe que en España y Portugal continuaron operando las comandancias, cambiando solo levemente el nombre de su Orden. Esto significa que ya aquí hubo una oportunidad de esconderse para quienes huían de la persecución de las autoridades francesas. En Portugal y España, los caballeros continuaron sus actividades, e incluso existe la leyenda de que de los seguidores se recibían cartas náuticas para viajar al Oeste -para descubrir América y al Este- para abrir el camino a las Indias. de los Templarios. La cruz, que estaba representada en las velas de los bergantines que iban a descubrir nuevas tierras, era absolutamente similar a la cruz de los Templarios. Cómo esto corresponde a la verdad histórica es tema de otro estudio. Y ahora cabe señalar que en España y Portugal se han conservado las comandancias de los Templarios. Pero es poco probable que pudieran convertirse en estructuras que precedieron a la masonería. Podrían actuar abiertamente sin crear una red secreta, desarrollar un sistema de señales secretas, etc.

Pero Poitou e Inglaterra son interesantes para nuestro análisis. Sin duda, los miembros de la Orden en el suroeste de Francia, donde se encontraban las posesiones inglesas, sabían en detalle lo que sucedía en las posesiones del rey francés y, por supuesto, lo informaron de inmediato a sus hermanos en Inglaterra. Fue aquí donde se desarrolló una situación favorable para la conservación de las estructuras templarias, aunque no de forma tan evidente como en la Península Ibérica. El rey inglés Eduardo II, que hasta hace poco fue nombrado caballero con la participación de los templarios y en el territorio de su priorato, era joven y de carácter débil. No quiso cumplir el pedido de su suegro el rey Felipe. Los templarios no le hicieron nada malo a Eduardo, gozaban del apoyo de la nobleza inglesa y disponían de grandes recursos económicos. La persecución de los Templarios podría crear conflictos adicionales con la nobleza inglesa, que ya no favorecía a Eduardo II por las adicciones homosexuales. Y por lo tanto en Inglaterra no hubo orden de arrestar a los templarios durante 3 meses. Este tiempo fue suficiente para que los Templarios, al tener información sobre los hechos en Francia y tener una extensa red de preceptorías en Inglaterra, pudieran prepararse para futuros eventos, crear un sistema de refugios secretos y elaborar las reglas para identificar los suyos. Y 3 meses después, después de la correspondencia con el rey francés y el Papa, cuando el rey de Inglaterra ordenó el arresto, solo 2 personas fueron arrestadas. Todos los demás se han ido. Nuevamente surge la pregunta ¿dónde desaparecieron, dónde se deben buscar y qué hicieron estos guerreros? Y por lo tanto en Inglaterra no hubo orden de arrestar a los templarios durante 3 meses. Este tiempo fue suficiente para que los Templarios, al tener información sobre los hechos en Francia y tener una extensa red de preceptorías en Inglaterra, pudieran prepararse para futuros eventos, crear un sistema de refugios secretos y elaborar las reglas para identificar los suyos. Y 3 meses después, después de la correspondencia con el rey francés y el Papa, cuando el rey de Inglaterra ordenó el arresto, solo 2 personas fueron arrestadas. Todos los demás se han ido. Nuevamente surge la pregunta ¿dónde desaparecieron, dónde se deben buscar y qué hicieron estos guerreros? Y por lo tanto en Inglaterra no hubo orden de arrestar a los templarios durante 3 meses. Este tiempo fue suficiente para que los Templarios, al tener información sobre los hechos en Francia y tener una extensa red de preceptorías en Inglaterra, pudieran prepararse para futuros eventos, crear un sistema de refugios secretos y elaborar las reglas para identificar los suyos. Y 3 meses después, después de la correspondencia con el rey francés y el Papa, cuando el rey de Inglaterra ordenó el arresto, solo 2 personas fueron arrestadas. Todos los demás se han ido. Nuevamente surge la pregunta ¿dónde desaparecieron, dónde se deben buscar y qué hicieron estos guerreros? crea un sistema de refugios secretos y elabora las reglas para identificar los tuyos. Y 3 meses después, después de la correspondencia con el rey francés y el Papa, cuando el rey de Inglaterra ordenó el arresto, solo 2 personas fueron arrestadas. Todos los demás se han ido. Nuevamente surge la pregunta ¿dónde desaparecieron, dónde se deben buscar y qué hicieron estos guerreros? crea un sistema de refugios secretos y elabora las reglas para identificar los tuyos. Y 3 meses después, después de la correspondencia con el rey francés y el Papa, cuando el rey de Inglaterra ordenó el arresto, solo 2 personas fueron arrestadas. Todos los demás se han ido. Nuevamente surge la pregunta ¿dónde desaparecieron, dónde se deben buscar y qué hicieron estos guerreros?

Entonces, resumamos el resultado intermedio. La orden de Philip no se implementó por completo en toda Francia debido al hecho de que su poder no se extendió a todas las tierras francesas. En el suroeste de Francia, así como en Inglaterra, los Templarios tuvieron 3 meses para preparar su refugio y crear un sistema de comunicaciones para estos refugios. La flota estacionada en La Rochelle partió con rumbo desconocido. Pero sus barcos individuales podrían regresar libremente al puerto durante otros 3 meses y transportar a los templarios en una dirección desconocida. Los Templarios, casi abiertamente, sobrevivieron en España y Portugal.

También se desconoce qué sucedió con el sistema bancario de los templarios. Por lo general, prestan atención a la desaparición de sus tesoros sin dejar rastro, pero además, todos conocían su sistema de usar una especie de "cheques de viajero", otorgar préstamos, transferir dinero, etc. su infancia Pero también había estructuras financieras que operarían en Europa y Medio Oriente: compañías comerciales de lombardos, judíos, templarios y algunos otros. Sabemos perfectamente qué tipo de resonancia se obtiene en caso de liquidación de una de las principales instituciones financieras: confusión, quiebra, etc. Pero, por alguna razón, todo esto no sucedió en relación con la derrota de los templarios. Tal vez los tesoros de los templarios no desaparecieron por ningún lado, y sus actividades en el área financiera y crediticia no cesaron? Esto también requiere una consideración por separado.

Volvamos a Inglaterra. La captura de dos Templarios de muchos cientos plantea la pregunta, ¿dónde están los demás? Aparentemente, algunos se mudaron a los Pirineos y otros a Escocia. En Escocia se desarrollaba una lucha contra Inglaterra por su independencia. Esta lucha continuó con éxito variable. Los ataques guerrilleros de los escoceses terminaron con éxito, y los escoceses perdieron importantes batallas, donde se necesitaba disciplina y el poder de la caballería caballeresca. La nobleza escocesa no reconocía ninguna disciplina y no quería obedecer a nadie. Y así, Robert Bruce, que estaba a la cabeza de esta lucha, llamó la atención sobre los templarios perseguidos. Incluso antes, no cumplió con las órdenes del Papa de arrestar a los Templarios, quienes encontraron refugio en Escocia. Y ahora, después de la orden tardía del rey inglés para su arresto, los Templarios fugitivos no solo pudieron encontrar refugio en Escocia, pero también el uso de sus artes marciales, tan necesarias para Robert the Bruce en la lucha contra los británicos. El resultado no tardó en decirse.

En 1314, cuando Jacques de Mollet fue quemado en Francia, Robert the Bruce derrotó por completo a las tropas inglesas en Bannockburn. Y el papel de los Templarios, como caballeros guerreros profesionales, estaba lejos de ser el último aquí. Por supuesto, este servicio a Escocia no podía quedar sin recompensa. Y aunque más tarde R. Bruce estableció relaciones con la Iglesia Católica, proporcionó a los Templarios un refugio no anunciado y la oportunidad de continuar con actividades secretas. Esto explica que en las remotas regiones del noroeste de Escocia, donde convenía mantener la comunicación marítima con Irlanda y a través de ella con el continente, se hayan conservado las tumbas de los templarios que datan de esta y épocas posteriores. Y lo que es muy destacable, en estas tumbas templarias hay símbolos masónicos. Esto también explica un fenómeno como Roslyn Chapel, donde, por un lado,

Se puede decir que en esto se pierden las huellas de los templarios en Inglaterra y Escocia, y no podremos llevar la línea histórica a la época de los primeros masones. Pero el asunto no es tan sencillo. John Robinson en su libro demostró de manera convincente que se pueden encontrar rastros de los templarios a fines del siglo XIV en relación con la rebelión de Wat Tyler. El propio Wat Tyler apareció de la nada, pero su apellido, Tyler, en inglés suena muy masónico y templario al mismo tiempo. Así suena en inglés la posición de uno de los oficiales en la logia masónica. Tyler también está relacionado con los templarios. Durante el capítulo, la guardia de los Templarios se exhibía en la azotea del templo, es decir, en su azotea. Y no es casualidad que la traducción de la palabra tyler signifique techador. Y finalmente, volviendo a J. Robinson, en la traducción del francés antiguo, tyler significa un asesino de guerreros, es decir, tal

La propia historia del levantamiento está conectada con hechos que están directamente relacionados con los templarios. Los rebeldes irrumpieron, en primer lugar, en el edificio e iglesia de los Hospitalarios y quemaron aquí todos los papeles de esta orden. Cabe señalar que todas las propiedades de los Templarios después de su dispersión fueron transferidas a los Hospitalarios, lo que no pudo sino provocar un deseo de venganza entre los seguidores de los Templarios. Lo más interesante es que cuando los rebeldes irrumpieron en la iglesia templaria, entregada a los Hospitalarios, no quemaron los papeles que había en su interior. Como si temieran dañar la propiedad de los templarios, los sacaron a la carretera y solo entonces los quemaron.

Los rebeldes actuaron de forma muy coordinada, aunque avanzaban hacia Londres desde direcciones distintas. Y en todos los casos, los bienes de los Hospitalarios fueron saqueados, y los comandantes de esta Orden fueron ejecutados. El asunto fue asombroso. Ya en Londres, los rebeldes derrotaron a toda la ciudad, convocaron al rey, que se escondía en la Torre, a negociaciones. Y cuando el rey, junto con su séquito, navegó en barcos para recibirlos, los líderes del levantamiento con un pequeño destacamento irrumpieron en la Torre. Surge la pregunta, ¿cómo logró un pequeño destacamento asaltar una poderosa fortaleza? Pero más sorprendente aún es que tras la toma de la Torre, los rebeldes se apoderaron del Prior de los Hospitalarios, lo ejecutaron y se retiraron sin causar más daños a la fortaleza y sin deseos de permanecer en ella. Esto sucedió no solo en Londres, sino también en otras regiones. hay una condena

Tras el arresto, los líderes de los rebeldes indicaron que actuaron siguiendo las instrucciones de cierta Gran Sociedad. Desafortunadamente, la investigación no se interesó en qué tipo de Gran Sociedad era. La continuación lógica de esta línea de ocultamiento de los verdaderos líderes del levantamiento es el hecho de que después de la muerte de W. Tyler y otros líderes, otros participantes no solo no fueron ejecutados, sino que pronto fueron liberados en la naturaleza. No se puede quitar la idea de que algunas personas que querían permanecer en la sombra, pero que tienen una influencia significativa, lograron su liberación. El odio a los Hospitalarios, las acciones coordinadas en diferentes regiones, el deseo de preservar la propiedad de los Templarios, la presencia de cierta Gran Sociedad: estas son evidencias que hacen que uno se pregunte: ¿no es este el rastro de una organización secreta creada después de la derrota? de la Orden del Temple?

Pero la presencia de una organización secreta que tiene conexiones con los templarios no significa que esta organización esté conectada con los masones. Por lo tanto, para una mayor reconstrucción, debemos acudir a la práctica ritual de los masones. Muchos términos utilizados en los rituales ingleses, así como algunas indicaciones oscuras en las leyendas masónicas, solo pueden entenderse recurriendo a la historia de los templarios. D. Robinson señala que durante la iniciación en la masonería, a los masones ingleses de la antigüedad se les dijo que se convertirían en hermanos de piratas y corsarios. Parecería, ¿de dónde viene esta frase? Pero si recordamos que la flota templaria partió de La Rochelle y se pierden rastros de ella, entonces comienza a surgir cierta imagen. Los templarios son perseguidos y las naves se convierten en su hogar y medio de subsistencia. Es poco probable que los caballeros hayan resultado ser pescadores diligentes, pero los corsarios afortunados y hábiles de ellos habrían resultado muy fácilmente. Eran forajidos, tenían barcos y habilidades militares, todo esto era una premisa lógica para convertirse en un corsario. ¿Quizás de ahí viene esa frase sobre “hermano a los corsarios” en la iniciación?

Ahora volvamos a los signos y frases usadas en la práctica masónica. Si el albañil medieval no tenía que esconderse y dar señales secretas para identificarse, entonces los templarios vencidos, para salvar sus vidas, tenían que aprender la práctica de palabras y símbolos secretos. Si para una reunión del gremio de albañiles no tenía sentido ocultar y proteger sus reuniones en secreto, entonces para los Templarios buscados, los porteros armados (tylers en inglés) y las marcas de identificación especiales eran vitales, lo que ayudaba a asegurar que un extraño no lo hiciera. no entrar en la reunión de la logia. Si para los albañiles del taller medieval no era necesario guardar ciertos secretos bajo pena de muerte, para los templarios la violación de los secretos amenazaba con la muerte a todos los miembros de la sociedad. Y finalmente, si los masones operativos fueran católicos fieles, luego los Templarios fueron rechazados por el Papa y, queriéndolo o no, se encontraron fuera de la iglesia. La presencia entre ellos de personas inclinadas al catolicismo, o traídas del sur de Francia, la herejía cátara, o del este, las ideas del gnosticismo, podría conducir a fatales desacuerdos y terminar en la derrota de la organización secreta. Por eso se ha vuelto tan necesario el principio de la tolerancia religiosa. Lo principal es que se reconocería la fe en el Único Gran Señor Dios, que recibió un nombre común para todos: el Gran Arquitecto del Universo. Todo lo que era inapropiado e incomprensible para la práctica de los masones operativos se vuelve bastante comprensible y comprensible si se trata de los Templarios escondidos y sus seguidores. o traído desde el sur de Francia la herejía cátara, o desde el Este - las ideas del gnosticismo, podría conducir a diferencias fatales y terminar en la derrota de la organización secreta. Por eso se ha vuelto tan necesario el principio de la tolerancia religiosa. Lo principal es que se reconocería la fe en el Único Gran Señor Dios, que recibió un nombre común para todos: el Gran Arquitecto del Universo. Todo lo que era inapropiado e incomprensible para la práctica de los masones operativos se vuelve bastante comprensible y comprensible si se trata de los Templarios escondidos y sus seguidores. o traído desde el sur de Francia la herejía cátara, o desde el Este - las ideas del gnosticismo, podría conducir a diferencias fatales y terminar en la derrota de la organización secreta. Por eso se ha vuelto tan necesario el principio de la tolerancia religiosa. Lo principal es que se reconocería la fe en el Único Gran Señor Dios, que recibió un nombre común para todos: el Gran Arquitecto del Universo. Todo lo que era inapropiado e incomprensible para la práctica de los masones operativos se vuelve bastante comprensible y comprensible si se trata de los Templarios escondidos y sus seguidores. quien recibió un nombre común para todos: el Gran Arquitecto del Universo. Todo lo que era inapropiado e incomprensible para la práctica de los masones operativos se vuelve bastante comprensible y comprensible si se trata de los Templarios escondidos y sus seguidores. quien recibió un nombre común para todos: el Gran Arquitecto del Universo. Todo lo que era inapropiado e incomprensible para la práctica de los masones operativos se vuelve bastante comprensible y comprensible si se trata de los Templarios escondidos y sus seguidores.

Tal reconstrucción también es confirmada por el análisis de los términos masónicos. Es bien sabido que la Orden del Temple era francófona. Sin embargo, muchos términos masónicos en inglés solo se pueden entender usando un conocimiento del francés antiguo. El origen francés antiguo de la palabra tyler ya se ha mencionado anteriormente. Pero no todo se limita a esto. Tyler protegió la logia de "cowans y espías", que en la explicación de los masones ingleses se traduce como profanos y espías. Pero ni en inglés, ni en escocés, no existe tal palabra "cowans". Pero en francés hay una palabra "couenne" pronunciada como "kuen", que significa un ignorante o un idiota. Esto significa que Tyler protege la logia. de los ignorantes y los curiosos.

El ritual inglés utiliza el gesto de identificación de "debida guardia". En francés, existe una expresión "gest du gard", que se traduce como un gesto de protección. En la versión en inglés, se acortó y se convirtió en inglés a "due-guard". Una imagen similar es con la palabra Lewis, que significa el hijo de un albañil. En francés existe la palabra Leves, que denota el concepto de brotes, descendencia. En inglés, hubo una inversión de v a w. El uso de esta palabra es bastante lógico para la designación de la descendencia de los masones. Y un ejemplo más. Durante la iniciación, al neófito se le coloca una soga, que en inglés se denota con la palabra cable-tow. Parecería que esto podría traducirse por la frase en inglés, que significa una cuerda de mar gruesa. Pero la versión francesa es más aceptable. Del francés, la palabra cable se puede traducir como ocasión o cabestro,

La enumeración de palabras similares en francés antiguo y escocés en el léxico masónico, cuyo significado se vuelve más comprensible cuando se traduce a un idioma moderno, puede continuar, pero es más apropiado en este caso volver al libro de D. Robinson, que se convirtió en una fuente de información para mí sobre este tema. Pero ya bastan estos ejemplos para dejar claro que los Templarios, como caballeros francófonos, dejaron a la masonería toda una serie de expresiones que no se pueden comprender correctamente si no se acude a la antigua lengua francesa hablada por los caballeros de la Orden de los Templo.

El mismo autor da varias explicaciones sobre la parafernalia ritual. El delantal masónico estaba hecho de piel de oveja. Los templarios, en cambio, lo único que se permitía usar en la ropa, además del lino basto, era la piel de oveja. La transición de la piel de oveja del atuendo de los templarios al símbolo de la pureza de la masonería se vuelve muy comprensible. Lo mismo ocurre con los guantes. Si los albañiles operativos de la Edad Media los guantes no correspondían a su estatus social, entonces para los caballeros los guantes eran un elemento indispensable de la vestimenta. Aquí también puede continuar la lista de ejemplos similares, pero nuevamente me remito a la fuente original.

Entonces, como resultado de la reconstrucción obtenida en el curso del movimiento a lo largo de la segunda dirección, obtenemos lo siguiente. Los Templarios tuvieron tiempo y oportunidad de trasladarse a lugares seguros y salvar su Orden. Pero si en España y Portugal tomó formas oficiales, en Inglaterra y Escocia condujo a la creación de una organización secreta. Al crear una red secreta de sus refugios, necesitaban signos y palabras secretas para identificar a los suyos, solo al observar el secreto, bajo la amenaza de muerte por su divulgación, los Templarios pudieron mantener su organización secreta. introducir el principio de paciencia religiosa en condiciones de excomunión de la Iglesia Católica. Por el contrario, todos estos símbolos, secretos, etc. completamente innecesarios eran los albañiles medievales.

Las huellas de la organización secreta de los sucesores de los Templarios se pueden rastrear muchas décadas después de su derrota. Desde ayudar a R. Bruce y sus luchadores escoceses por la independencia hasta el levantamiento de W. Tyler: este es el camino de los caballeros y sus seguidores que no querían aceptar las decisiones del rey francés y el Papa. Se pueden encontrar rastros de sus estructuras secretas desde el sur de Inglaterra hasta el noroeste de Escocia. Los antiguos términos franceses utilizados por los templarios fueron adoptados por los masones, aunque a lo largo de las décadas y los siglos su pronunciación y, a veces, su significado fueron cambiando. Pero una vez que comenzamos a usar el francés antiguo para traducir estos términos, muchas cosas se vuelven más claras. Y, por último, una serie de artículos de parafernalia masónica, aparentemente de una forma u otra, migraron de los atributos de los templarios.

Las dos direcciones convergieron en algún momento durante el siglo XV. Durante el tiempo posterior a la derrota de los Templarios, su organización secreta cambió, perdió gradualmente su significado original, aparecieron nuevos símbolos y nuevas ideas. Pero los principios básicos se han llevado a través de los siglos. La fraternidad, la asistencia mutua, la tolerancia religiosa, el carácter secreto y luego simplemente cerrado de la organización, el deseo de conocer la verdad y la Gran Luz, la fidelidad a los valores espirituales y morales y la construcción conjunta del Templo dentro de uno mismo y en el mundo exterior: esta es una lista lejos de ser completa de aquellas ideas que son comunes a los masones y templarios.

Los caballeros firmaron sus papeles como Caballero del Templo. Pero el Templo, como llamaban a su Orden, fue destruido. Ellos nos legaron a nosotros, masones, como sus sucesores, para restaurar este Templo.

Literatura

  1. Ambelain R. Jesús o el secreto mortal de los Templarios. - San Petersburgo: Eurasia, 2007.
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  4. Dezgri A. La Orden de los Templarios y la Caballería Templaria Masónica.- San Petersburgo: Eurasia, 2008.
  5. Dezgri A. La historia secreta del Grial: cátaros, templarios, rosacruces y masones. - San Petersburgo: Eurasia, 2008.
  6. Zharinov E. Jacques de Molay. Moscú: Olimp, Astrel, 1999. Legman J., Lee G.Ch. Historia de los Templarios. — M.: Olma-press, 2002.
  7. Knight K., Lomas R. El Testamento Masónico. El legado de Hiram. — M.: Eksmo, 2006. Lobe M. La tragedia de los Caballeros Templarios. - San Petersburgo: Eurasia, 2003.
  8. Robinson D. Nacido en la sangre. Secretos perdidos de la masonería. M.: Etcétera, 2004.

 

(*) G.L.P

 

 

miércoles, 20 de febrero de 2019

Haciendo Historia

El 11 de septiembre de 1973 las fuerzas armadas de la República de Chile pusieron en marcha un plan de exterminio de la población civil que fue organizado conjuntamente con agentes de la CIA y del Departamento de Estado de USA, como quedó demostrado en la investigación que realizó el Senado norteamericano y conocida como Comisión Church.

Uno de los primeros actos de esta organización criminal en que se convirtieron las fuerzas armadas fue el derrocamiento cruento del presidente legítimo de Chile hecho que es plenamente conocido por las imágenes de televisión que reflejan el momento en que aviones militares bombardearon el Palacio de la Moneda.

El presidente Allende había nombrado una serie de voluntarios en su mayoría integrantes de la Juventud Socialista como su custodia personal que realizaba las tareas de seguridad de su entorno en todos sus desplazamientos y en las residencias presidenciales de La Moneda, de Cañaveral, entre otras. Estas personas a las que la prensa golpista acusaba, en forma despectiva, de ser los GAP (Grupo de Amigos Personales), son los únicos que, junto a un grupo mínimo de policías y carabineros leales, defendieron bajo órdenes directas del Jefe del Estado la constitución y las libertades civiles y democráticas de Chile

Hasta el 18 de octubre de 1999 en que tres sobrevivientes de aquellos hechos testimoniaron ante el Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional y en las que el Equipo Nizkor tuvo la posibilidad de ordenar los datos que ellos traían en forma jurídicamente válida, así como preparar los testimonios de estos hombres que, en otro país y en otras circunstancias, merecerían no sólo el respecto de todos los democrátas, sino que además tendrían los máximos honores y reconocimientos por parte de la sociedad y del Estado. Nada más lejos de esa realidad la situación de estos sobrevivientes en el Chile moldeado en la impunidad. Muchos de ellos viven en la más extrema pobreza e incluso los máximos dirigentes actuales del Partido Socialista han faltado a la memoria de aquellos hombres que mantuvieron la dignidad ante el oprobio y la traición.

A lo largo de la innoble historia de la dictadura militar chilena, los centros de detención jugarían un rol vital en su política de represión. Estos lugares serían establecidos con el solo propósito de llevar acabo, en forma sistematizada y en total impunidad, los delitos de terrorismo de Estado, persecución política y religiosa, tortura, secuestro calificado, homicidio, desaparición forzada e inhumación ilegal, entre otros crimenes. De regimientos a comisarías, de bases aéreas a casas de fundo, de retenes a escuelas y edificios públicos, de buques a casa particulares, cada uno de estos lugares serían utilizados por los servicios de seguridad para el uso sistemático de maltrato, violación, tortura y asesinato.

A lo largo del país se establecerían mas de 1168 lugares “públicos” (Estadio Nacional, Isla Dawson, Pisagua, Chacabuco, Isla Quiriquina, Cuatro Alamos etc..) y “secretos” (Villa Grimaldi, AGA, La Firma, Colonia Dignidad, Venda Sexy, Londres 38, José Domingo Cañas, etc...), dedicados a la detención, procesamientos, tortura y aniquilamiento de los opositores de la dictadura militar. La represión fue a tal escala, que a lo largo de su terrible historia contó con la participación de miles y miles de miembros de las fuerzas armadas, policías y civiles (torturadores, médicos, enfermeras, secretarias, chóferes, pilotos, mecánicos, informantes y delatores), convirtiéndose en una verdadera "industria de la tortura y la desaparición forzada".

Se calcula que solo en los primeros meses después del golpe militar casi 45,000 mil personas fueron detenidas por los servicios de seguridad de la dictadura. En estas paginas trataremos de recopilar, de diferentes fuentes (testimonios personales, libros, periódicos, documentales, documentos gubernamentales, casos jurídicos y “confesiones de agentes”), la lista de los centros de detención que existieron durante los 17 años de dictadura militar y donde centenares de miles de individuos fueron torturados, mas de 2000 fueron asesinados y 1197 fueron hechos desaparecer.

Ubicación del Socialismo Chileno

El socialismo responde en todo el mundo a necesidades históricas derivadas de las condiciones de vida y trabajo que ha impuesto el desarrollo de la economía capitalista. Pero el hecho de concordar eficazmente con el sentido de la evolución general de la sociedad, él contiene las soluciones de todos los grandes problemas materiales y morales de nuestro tiempo. Es, por eso, en la actualidad, la única fuerza realmente creadora.

Impulso espontáneo de las masas obreras en un comienzo, fue determinado en consonancia con los progresos del industrialismo sus objetivos específicos y plasmándolos en una doctrina que tiene alcance universal, tanto por el valor humano de sus postulados esenciales como por el hecho de que el sistema capitalista, dotado de extraordinario dinamismo expansivo, llevó sus formas de vida a todas las regiones de la tierra, suscitando en todos los pueblos parecidas necesidades.

Nuestro Partido representa en Chile el impulso histórico del verdadero socialismo y la auténtica doctrina socialista que recoge para superarlos – y no para destruirlos - todos los valores de la herencia cultural como un positivo aporte a la nueva sociedad que deberá erigirse sobre el mundo capitalista en bancarrota. 

Tiene, por lo tanto, la misión de educar políticamente a la clase trabajadora para hacerla capaz de cumplir la tarea que le corresponde en este periodo de crisis orgánica de la sociedad burguesa y aquella otra que le exigirá en un porvenir próximo la construcción de una sociedad sin clases.

Es necesario que los militantes del PS y el pueblo comprendan plenamente la significación histórica y humana del socialismo, la justeza de su posición revolucionaria frente a los problemas nacionales y mundiales de su acción política. Dialécticamente generado por el capitalismo, el socialismo constituye su necesaria superación, tanto en la evolución interna de las distintas sociedades nacionales como en la transformación mundial de las relaciones económicas.

Desde sus orígenes el socialismo ha sido la avanzada del movimiento histórico de las clases trabajadoras. Al quebrantarse de manera definitiva el antiguo régimen - económicamente con la Revolución Industrial y políticamente con la Revolución Francesa, en la segunda mitad del siglo XVII - pasó a ocupar la dirección del Estado la burguesía ilustrada y mercantil, dándose comienzo a la expansión del industrialismo capitalista, en lo económico, y del individualismo liberal en lo político.

La ruptura de las formas orgánicas de la sociedad nobiliaria y, con ellas, de los últimos vestigios de las garantías corporativas que protegieron el trabajo artesanal, fue necesario para el acrecentamiento del poderío burgués; pero las instituciones democrático - liberales que entraron a reemplazarlas - incluso los derechos primarios consagrados en la ley positiva - no tuvieron vigencia real para las mayorías asalariadas.

La nueva clase dominante que manejaba la producción y el comercio fue imprimiendo su estilo de vida a la sociedad. Despojado de su dignidad ética y convertido en precaria mercancía, el trabajo humano quedó sujeto a la mecánica ley de la oferta y la demanda, dentro de la libre concurrencia de las fuerzas económicas.

Así, mientras se reconocían enfáticamente en la letra de las Constituciones los «derechos del hombre y del ciudadano», quedó la masa asalariada sometida a una servidumbre económica que, en muchos aspectos, era aún más intolerable que la del esclavo antiguo y la del siervo medieval. La voluntad burguesa de enriquecimiento material, ejercida con prescindencia de toda consideración superior, condujo a una explotación sistemática del trabajo humano. Pudo verse, desde entonces, en los grandes centros de la industria capitalista y en los países coloniales donde ella iba en busca de materias primas y mercados propios, una pauperización creciente de las masas obreras, tomadas en su conjunto, que seguía como proceso correlativo al aumento del lucro de las empresas privadas.

El estado democrático-liberal - instrumento político del poder económico de la burguesía en ascenso - se resistió a intervenir en los procesos de la producción y del intercambio, en virtud del principio de la economía libre concebido como el fundamento natural de la prosperidad pública y del equilibrio dinámico de las energías sociales. Colocadas, en cierto modo, al margen del Estado, las clases trabajadoras no pudieron contar sino con sus propios recursos frente a los dueños de la técnica y del dinero, que disponían también para la defensa de sus intereses de eficaces mecanismos jurídicos y represivos.

Por primera vez en la revolución de 1848 en Francia actuó el proletariado, no como simple fuerza de choque de la burguesía progresista, sino como una clase ya consciente de sus peculiares reivindicaciones. También entonces aparecieron expuestas por primera vez de una manera sistemática en el MANIFIESTO COMUNISTA de Marx y Engels las ideas que han servido de base doctrinal a su impulso revolucionario. Desde esa fecha hasta nuestros días el movimiento reivindicativo de la clase trabajadora ha ido desenvolviéndose progresivamente en el plano político y defendiendo su contenido ideológico en el proceso mismo de la evolución económico-social.

Por su parte, el capitalismo ha ido desarrollándose en forma tal que ha generado los más repudiables fenómenos antisociales, como el imperialismo y la guerra. El primero se ha concentrado en el sojuzgamiento colonial de los pueblos de economía retrasada por potencias gobernadas bajo el control de grandes concentraciones capitalistas, y el segundo se ha manifestado en una pugna permanente de esas potencias para lograr el dominio del mundo.

Demostración irrefutable de esa fatídica lucha fue la Primera Guerra Mundial, promovida por intereses enteramente ajenos a los trabajadores.

Estamos ahora en un periodo de grandes mutaciones históricas. La lucha por el dominio del mundo ha entrado en su etapa decisiva. Los poderes imperialistas triunfantes en la Segunda Guerra se aprestan para nuevas empresas bélicas en las que habrá de resolverse, a favor de algunas de ellos, el inestable equilibrio político existente, o se dislocará por completo la civilización bajo el incalculable efecto destructivo de las armas científicas.

Por encima de las formas políticas en que se desenvuelve la acción de los estados, tres son las fuerzas principales que se manifiestan en la realidad internacional, determinando cada una de ellas, en un mayor o menor grado, según las circunstancias y los lugares, las relaciones internas y externas de los pueblos; el alto capitalismo financiero, que, en conformidad al principio de libre empresa, procura mantener en pie la quebrantada estructura del régimen burgués; el comunismo soviético, que sirve de vehículo al afán hegemónico y nacionalista del Estado ruso; y el socialismo revolucionario, que aspira a la efectiva liberación económica y política de las masas trabajadoras del mundo entero.

La implantación del socialismo está, pues, a la orden del día. 

* C.O.S.

lunes, 18 de febrero de 2019

El Rey Midas

Lo más sorprendente del capitalismo, a la vez que terrorífico, es su capacidad para asimilar cualquier elemento subversivo que lo ataque, cuestione o incomode. Este factor determina el mercantilismo imperante que pone precio a bienes materiales o espirituales. La cultura, patrimonio por excelencia del ser humano, no queda eximida de semejante tratamiento, y es víctima de restricciones y vejaciones constantes.

La cultura, bien entendida desde concepciones mentalistas, bien desde la concepción total de Tylor, excede el elitismo cultural sostenido sobre la supremacía de estatus y los prejuicios de clase. Es manifiesta la inconsistencia resultante de tratar la cultura como una posesión más, al mismo tiempo que se aboga por un intercambio cultural. Desde una perspectiva funcional, resulta evidente que el éxito evolutivo del ser humano, su capacidad para adaptarse y su aptitud para la superrvivencia están determinados por compartir y reutilizar los hallazgos, inventos, descubrimientos y formas de vida. Cualquier invención moderna sólo es posible gracias a la acumulación paulatina de una serie de invenciones anteriores, por lo cual, en una humanidad que debería tender a unos objetivos generales comunes, la cooperación y el intercambio deberían regir las relaciones interpersonales y suprapersonales.

Cualquier grupo humano, aunque se trate de minorías marginales que no hayan pisado nunca una escuela, posee una cultura propia tan válida y tan eficaz en su ambito de acción como cualquier otra. En este sentido, el principal error es vincular la cultura a un sistema educativo que sólo sirve para justificar y validar las mal llamadas y peor ejercidas democracias de los países occidentales, que utilizan los colegios para el adoctrinamiento encubierto.

Nuestra sociedad, tan superiormente culta, nos inmuniza ante el sufrimiento de los otros, cosificándolos, mutilando nuestra capacidad crítica, anestesiando nuestra conciencia hasta el coma irreversible. El montaje democrático, que beneficia unicamente a pequeñas minorías y a los enormes grupos empresariales, se sostiene gracias a la contrucción paralela de una realidad ficticia donde las incongruencias del sistema son deliberadamente omitidas. Mientras que nuestras empresas violen los derechos humanos en el otro mundo, aquel que no aparece en las noticias ni en los libros de Historia; mientras que nuestros gobiernos apoyen y participen en los genocidios y en la esclavitud de países que nos son desconocidos; mientras que las grandes empresas exploten a los trabajadores sin hacerles partícipos de los vertiginosos beneficios económicos; mientras los medios de comunicación se sometan al poder en una relación de recíproco vasalleje; mientras que permanezcamos inmunizados a todo tipo de sufrimiento e injusticia; el capitalismo seguirá convietiendo en oro todo lo que toca.

Nuestra sociedad es un rey Midas, que ha alcanzado el concimiento supremo, la piedra filosofal, el arte de sublimar la materia, pudiendo así convertir en oro cualquer cosa, hasta los propios excrementos; lo cual no deja de ser una manera curiosa de revalorizar la mierda.

Las lecciones de la Comuna de Paris

La Comuna de París de 1871 fue uno de los episodios más grandes e inspiradores de la historia de la clase obrera. Fue un gran movimiento revolucionario en el que los trabajadores de París reemplazaron el Estado capitalista por sus propios órganos de gobierno y mantuvieron el poder político hasta su caída en la última semana de mayo. Los trabajadores parisinos lucharon, en condiciones extremadamente difíciles, para poner fin a la explotación y la opresión, para reorganizar la sociedad sobre bases completamente nuevas.

Hoy es importante para los socialistas aprender las lecciones surgidas de estos importantes acontecimientos. Veinte años antes del advenimiento de la Comuna, tras la derrota de la insurrección obrera en junio de 1848, el golpe militar del 2 de diciembre de 1851 llevó al poder al emperador Napoleón III. Al principio, el nuevo régimen bonapartista parecía inquebrantable. Los trabajadores fueron derrotados y sus organizaciones prohibidas. A finales de la década de los sesenta, sin embargo, el fin del auge económico y la recuperación del movimiento obrero debilitaron seriamente al régimen. Se hacía evidente que sólo podría sobrevivir algún tiempo en base a una nueva guerra. En agosto de 1870 los ejércitos de Napoleón III marcharon contra Bismarck.

La guerra, según Napoleón III, permitiría a Francia conquistar nuevos territorios, debilitar a los enemigos internos y poner fin a la crisis financiera e industrial que asolaba el país.

Guerra y revolución

No obstante, ocurre con frecuencia que la guerra conduce a la revolución y no es una relación casual. Una guerra aparta a la clase obrera de su rutina diaria, las masas examinan más detenidamente las acciones del Estado, de los generales, de los políticos y de la prensa en un grado infinitamente superior que en tiempos de paz.

Eso es así particularmente en el caso en una derrota. El intento de Napoleón III de invadir Alemania fue su perdición. El 2 de septiembre, cerca Sedan -en la frontera oriental de Francia- el ejército de Bismarck capturó al emperador junto a 100.000 soldados. En París, las masas tomaron las calles de la capital para exigir el fin del imperio y la proclamación de una nueva república democrática.

La llamada oposición republicana estaba aterrorizada por este movimiento de las masas, pero a pesar de todo, el 4 de septiembre se vieron obligados a declarar la república. Se formó un nuevo "gobierno de defensa nacional" cuya figura clave era el general Trochu. También estaba en el gobierno, Jules Favre, un representante típico del republicanismo capitalista que declaró públicamente que no cederían a los prusianos "ni una sola pulgada del territorio, ni una sola piedra de nuestra fortaleza".

Las tropas alemanas rápidamente rodearon París y establecieron un cerco sobre la ciudad. El pueblo apoyó inicialmente al nuevo gobierno en nombre de la "unidad" contra un enemigo extranjero. Sin embargo, esta unidad tardó poco en romperse.

A pesar de las declaraciones públicas, el Gobierno de Defensa Nacional no creía que fuera posible defender París. Fuera del ejército regular, una milicia formada por 200.000 personas -la Guardia Nacional- estaba decidida a defender París, pero los trabajadores armados dentro de París eran una amenaza mayor para los intereses de clase de los capitalistas franceses que el ejército extranjero que estaba a las puertas de la ciudad.

El gobierno decidió que lo mejor sería capitular ante Bismarck tan pronto como fuera posible. Sin embargo, el fervor patriótico de los parisinos y de la Guardia Nacional impidieron al gobierno decirlo públicamente. Trochu quería ganar tiempo y contaba con los efectos sociales y económicos causados por el asedio para romper la resistencia de los trabajadores parisinos. Mientras tanto el gobierno empezó a negociar en secreto con Bismarck.

Según pasaban las semanas aumentaba la hostilidad hacia el gobierno. Comenzaron a circular rumores sobre las negociaciones con Bismarck. La caída de Metz el 8 de octubre fue la chispa que provocó una nueva manifestación de masas.

El día 31 varios contingentes de la Guardia Nacional encabezados por los Blanquistas atacaron y ocuparon temporalmente la Asamblea Nacional. En ese momento, los trabajadores aún no estaban preparados para actuar contra el gobierno y por eso la insurrección quedó aislada.

Blanqui huyó y Flourens, el valeroso comandante de los batallones de Elleville, fue encarcelado. En París el hambre y la pobreza producto del asedio estaban provocando consecuencias desastrosas y cada vez era mayor la necesidad de romper el cerco.

El intento de salir y tomar Buzenval, el 19 de enero, acabó en otra derrota. Trochu dimitió y fue sustituido por Vinoy que en su primer discurso pidió a los parisinos que no "tuvieran ilusiones" en la posibilidad de derrotar a los prusianos. Quedaba en evidencia que el gobierno intentaba capitular. Los clubs políticos y los Comités de Vigilancia pidieron armas a la Guardia Nacional y marcharon hacia el Hôtel de Ville.

Otros destacamentos fueron a la prisión a liberar a Flourens. La presión desde abajo obligó a los demócratas de clase media de la Alianza Republicana a exigir un "gobierno popular" que organizara la resistencia efectiva contra los prusianos. Sin embargo, cuando la Guardia Nacional llegó al Hôtel de Ville, Chaudry, representante del gobierno, gritó furioso a los delegados de la Alianza y eso bastó para que los republicanos se dispersaran.

Los guardias bretones, leales al gobierno, atacaron a los Guardias Nacionales y a los manifestantes que intentaban oponerse a esta traición. Y los Guardias Nacionales tuvieron que retirarse.

Este primer choque armado con el gobierno marcó el final de la Alianza Republicana a pesar de que el movimiento contra el gobierno amainó temporalmente. A partir del 27 de enero de 1871 el Gobierno de Defensa Nacional pudo seguir con sus planes de capitulación ideados desde el principio del asedio.

París y la Asamblea Nacional

Las zonas rurales de Francia estaban a favor de la paz y los votos del campesinado en las elecciones de la Asamblea Nacional de febrero dieron la mayoría a los candidatos conservadores y monárquicos. La Asamblea nombró jefe de gobierno a un empedernido reaccionario: Adolphe Thiers. El choque entre París y la mayoría "rural" de la Asamblea era inevitable.

La contrarrevolución abierta levantó cabeza, espoleando, a su vez, a la revolución. Los soldados prusianos estaban a punto de entrar en la capital y esto dio nuevos bríos a las protestas. Los trabajadores y los sectores más pobres de la población apoyaban las manifestaciones armadas de la Guardia Nacional, denunciaban a Thiers y a los monárquicos como traidores y defendían una "lucha a muerte" por la defensa de la república.

Los acontecimientos del 31 de octubre y el 22 de enero representaban un pequeño anticipo del nuevo camino que emprendería el movimiento. Toda la clase obrera parisina, ahora sí, estaba preparada para la rebelión.

La reaccionaria Asamblea Nacional provocaba constantemente a los parisinos, a los que calificaba de criminales y asesinos. Suspendió la paga, de por sí muy baja, de los Guardias Nacionales, a menos que demostraran que eran "incapaces de trabajar". El cerco dejó a muchos trabajadores desempleados y prestar servicio en la Guardia Nacional era la única alternativa al hambre.

El gobierno obligó a pagar en 48 horas todos los alquileres atrasados y las deudas, esto representaba una amenaza inmediata de bancarrota para los pequeños comerciantes. París se vio privada de su estatus como capital de Francia, transferida a Versalles. Estas medidas y muchas otras golpearon a los sectores más pobres de la sociedad pero también provocaron la radicalización de la clase media parisina, cuya única esperanza de salvación real ahora era el derrocamiento revolucionario de Thiers y la Asamblea Nacional.

Transformación de la Guardia Nacional

La rendición a los prusianos y la amenaza de la restauración monárquica transformó la Guardia Nacional. Se eligió el "Comité Central de la Federación de Guardias Nacionales" que representaba a 215 batallones, equipados con 2.000 cañones y 450.000 armas de fuego. Aprobaron nuevos estatutos en los que se declaraba "el derecho absoluto de los Guardias Nacionales a elegir sus dirigentes y revocarlos tan pronto como perdieran la confianza de sus electores".

En esencia, el Comité Central y sus correspondientes estructuras en cada batallón fueron precursores de los soviets de trabajadores y soldados, que aparecieron en Rusia durante las revoluciones de 1905 y 1917.

La nueva dirección de la Guardia Nacional tuvo que poner a prueba su autoridad con rapidez. Cuando el ejército prusiano entró en París, decena de miles de parisinos armados se reunieron con la intención de atacar al invasor. El Comité Central intervino para evitar una lucha desigual para la que no estaban preparados. El éxito del Comité Central asentó firmemente su autoridad y se lo reconoció como la dirección del pueblo. A Clément Thomas, el comandante nombrado por el gobierno, no le quedó otra alternativa que dimitir. Las fuerzas prusianas ocuparon parte de la ciudad durante dos días y después se retiraron.

Thiers había prometido a los Rurales de la Asamblea restaurar la monarquía. Su tarea inmediata era poner fin a la situación de "doble poder" en París. Los cañones bajo la dirección de la Guardia Nacional, y en particular los de Montmartre, posición desde la que se dominaba la ciudad, eran toda una amenaza a la "ley y el orden" capitalistas. A las 3 de la madrugada del 18 de marzo, el gobierno envió a 20.000 soldados regulares a tomar estos cañones que estaban al mando del general Lecomte.

Los tomaron sin apenas dificultad. Sin embargo, la expedición partió sin tener en cuenta la necesidad de llevar los medios necesarios para transportar los cañones. A las 7 de la madrugada todavía no habían llegado los aparejos. Las tropas se encontraron rodeadas por una multitud de trabajadores incluidos mujeres y niños, en ese momento entró en acción la Guardia Nacional. La multitud desarmada, los Guardias Nacionales y los hombres de Lacomte se lanzaron acusaciones mutuas en medio de una densa reunión. Algunos soldados empezaron a confraternizar con los Guardias Nacionales.

Lecomte ordenó a sus hombres disparar a la multitud. Nadie disparó. Los soldados y los guardias nacionales se aplaudían mutuamente y se abrazaban. Aparte de un breve intercambio de fuego en la plaza Pigalle, el ejército se desmoronó ante los Guardias Nacionales sin ofrecer la menor resistencia. Lecomte y Clément Thomas, el ex comandante de la Guardia Nacional que había disparado a los trabajadores en 1848, fueron arrestados. Soldados furiosos los ejecutaron poco después.

Thiers no había previsto la deserción de sus tropas. Presa del pánico, huyó de París y ordenó al ejército y a los servicios civiles abandonar la ciudad y los fuertes circundantes. Quería salvar lo que quedaba del ejército y evitar el contagio del París revolucionario.

El viejo aparato del Estado estaba fuera de juego y la Guardia Nacional tomó los puntos estratégicos de la ciudad sin encontrar ninguna resistencia. El día 18 de marzo por la tarde, se formó un nuevo gobierno revolucionario basado en el poder armado de la Guardia Nacional.

Gobierno revolucionario

La primera disyuntiva a la que se enfrentó el Comité Central fue qué hacer con el poder. ¡No tenían "mandato legal" para gobernar! Después de mucha discusión, estuvieron de acuerdo en quedarse en el Hôtel de Ville durante "unos cuantos días" durante los cuales se organizarían elecciones municipales (comunales). Al grito de "¡viva la Comuna!" los miembros del Comité Central expresaban el deseo de delegar el poder cuanto antes.

La cuestión inmediata sobre la que decidir era qué hacer con Thiers y el ejército, en retirada hacia Versalles. Eudes y Duval propusieron que la Guardia Nacional los persiguiera para acabar con lo que quedaba de las fuerzas de Thiers. Sus llamamientos cayeron en saco roto. La mayoría del Comité Central eran hombres muy moderados, sin el temperamento ni las ideas necesarias para las tareas que les había impuesto la historia.

El Comité Central inició las negociaciones con los antiguos alcaldes y con varios "conciliadores" para fijar la fecha de las elecciones. Esto centró su atención hasta que finalmente se celebraron el 26 de marzo. Thiers utilizó este valioso tiempo. Comenzó una campaña de propaganda y mentiras contra París, dirigida a las provincias, y, con la ayuda de Bismarck, reforzó la cantidad de armas, de soldados y su moral para preparar un nuevo ataque sobre París.

La recién elegida Comuna sustituyó la dirección de la Guardia Nacional por un gobierno oficial del París revolucionario. El gobierno estaba formado por personas relacionadas con el movimiento revolucionario de una u otra forma. La mayoría se podrían describir como "republicanos de izquierda", empapados de la nostalgia idealizada del régimen jacobino de la Revolución Francesa.

De sus 90 miembros, 25 eran trabajadores, 13 pertenecían al Comité Central de la Guardia Nacional y 15 a la Asociación Internacional de Trabajadores. Los blanquistas, hombres enérgicos siempre dispuestos a medidas extremas y dramáticas pero con ideas políticas muy vagas, y los internacionalistas eran una cuarta parte de la Comuna.

El propio Blanqui estaba en una prisión provincial. Los pocos reaccionarios electos abandonaron sus puestos con distintos pretextos. Otros fueron arrestados cuando se descubrieron sus nombres en los archivos de la policía y fueron identificados como antiguos espías del régimen imperial.

Construyendo una nueva sociedad

La Comuna eliminó todos los privilegios de los funcionarios estatales, congeló los alquileres, los talleres abandonados pasaron a estar controlados por los trabajadores, aprobó medidas para limitar el trabajo nocturno, garantizar la subsistencia de los pobres y los enfermos. La Comuna declaró que su objetivo era poner fin a "la anarquía y la competencia ruinosa entre los trabajadores por el beneficio de los capitalistas" y la "diseminación de los ideales socialistas.

La Guardia Nacional estaba abierta a toda la población y organizada, como ya hemos visto, en líneas estrictamente democráticas. Se ilegalizaron los ejércitos "separados y aparte del pueblo". Se requisaron los edificios públicos para aquellos que no tenían un techo bajo el que cobijarse. La educación pública era para todos, lo mismo ocurría con los teatros, los centros de cultura y aprendizaje.

A los trabajadores extranjeros se los trataba como hermanos y hermanas, como soldados de la "república universal del trabajo internacional". Se celebraban reuniones día y noche, en ellas miles de hombres y mujeres normales debatían sobre todos y cada uno de los aspectos de la vida social y sobre cómo organizar la sociedad en interés del bien común.

El carácter social y político de esa sociedad, que poco a poco tomaba forma bajo el escudo de la Guardia Nacional y la Comuna, era incuestionablemente socialista. La ausencia de cualquier precedente histórico, la ausencia de una dirección y un programa claro, combinado con la dislocación social y económica de una ciudad asediada, necesariamente suponía que los trabajadores caminasen a tientas a la hora de ocuparse de los requerimientos concretos que implicaba la organización de la nueva sociedad.

Se ha escrito mucho sobre la incoherencia, la pérdida de tiempo y energía, sobre los errores del pueblo parisino en las diez semanas que estuvo en el poder dentro de los muros de una ciudad asediada. La mayoría son verdad. Los comuneros cometieron muchos errores.

Marx y Engels fueron muy críticos con los comuneros por no tomar el control del Banco de Francia, que seguía pagando millones de francos a Thiers para armarse contra París. Sin embargo, la mayoría de las iniciativas importantes tomadas por los trabajadores apuntaban en dirección a la completa emancipación social y económica de la población asalariada como clase. Ante todo, a la Comuna le faltó tiempo.

El camino hacia el socialismo fue cortado por el regreso del ejército de Versalles y el terrible baño de sangre que puso fin a la Comuna.

El aplastamiento de la Comuna

Sin duda, la Comuna subestimó la amenaza que representaba Versalles, ni intentó atacar ni tampoco se preparó seriamente para su defensa. A partir del 27 de marzo comenzaron los intercambios ocasionales de disparos entre las posiciones del ejército de Versalles y las murallas que rodeaban París.

El 2 de abril, un destacamento de comuneros que se dirigía a Courbevoie fue atacado y tuvo que regresar. Los prisioneros capturados por las fuerzas de Thiers fueron fusilados. Al día siguiente, debido a la presión de la Guardia Nacional, la Comuna lanzó una ofensiva contra Versalles. Sin embargo, a pesar del entusiasmo de los batallones de comuneros, éstos carecían de preparación política y militar serias -se pensaba ingenuamente que, como el 18 de marzo, el ejército de Versalles se pasaría a la Comuna al ver la Guardia Nacional- lo que los condenó al fracaso.

Esta derrota no sólo provocó muertos y heridos, entre ellos Flourens y Duval, asesinados cuando fueron capturados por el ejército de Versalles, el optimismo fatalista de las primeras semanas dio lugar a un sentimiento de peligro inminente y derrota, lo que acentuó las divisiones y la rivalidad entre los mandos militares.

El ejército de Versalles entró en París el 21 de mayo de 1871. En el Hôtel de la Ville, los comuneros no consiguieron organizar una estrategia militar seria y, en el momento decisivo, la Comuna sencillamente dejó de existir, dejando toda la responsabilidad en manos del Comité de Seguridad Pública, completamente ineficaz. A los Guardias Nacionales se les permitió ir a luchar a sus localidades; esta decisión junto con la ausencia de un mando centralizado, impidió el aglutinamiento de una fuerza comunera seria capaz de ofrecer resistencia al empuje de las tropas de Versalles.

Los comuneros lucharon con tremendo valor y finalmente el 28 de mayo fueron derrotados. Las fuerzas de Thiers provocaron una terrible carnicería en la que murieron más de 30.000 hombres, mujeres y niños, en las semanas siguientes asesinaron aproximadamente a otras 20.000 personas. Los escuadrones de fusilamiento continuaron trabajando durante el mes de junio, asesinando a todo aquel sospechoso de haber cooperado con la Comuna.

Marx y Engels siguieron de cerca los acontecimientos de la Comuna y sacaron muchas lecciones del primer intento de construir un Estado obrero. Sus conclusiones se pueden encontrar en los escritos publicados bajo el título “La guerra civil en Francia” con una notable introducción de Engels. Antes del 18 de marzo declararon que, debido a las circunstancias desfavorables, la toma del poder representaba "una locura desesperada.

Sin embargo, los acontecimientos del 18 de marzo pusieron el poder en manos de los trabajadores. De forma abrupta, la clase obrera de París no sólo tuvo que luchar por mejoras inmediatas, sino por una "república universal" que pusiera fin a la explotación, a las divisiones de clase, al militarismo reaccionario y a los antagonismos sociales.

En la Francia moderna, como en todos los países industrializados del mundo, las condiciones materiales para la consecución de estos grandes objetivos hoy son incomparablemente más favorables que en 1871.

Ahora nuestro deber es crear una base firme para conseguir la sociedad por la que lucharon y murieron los hombres y mujeres de la Comuna.